El Silencio

Hoy me he levantado, además de a las rutinarias y puñeteras 6.30, pensando en el valor del silencio. Ese silencio que ni se identifica con activar el modo autista ni entiende de muestras de aversión a salivar la comisura de los labios hasta hacer charco. El silencio como experiencia abstracta inalienable hasta en un lapso de tiempo. Una experiencia que siempre está ahí. En forma de sosiego, contemplación, disfrute, observación o como te de la gana llamarlo. Somos nosotros los que optamos por pedirle cita o no. Si lo hacemos (de lo contrario, apúntate a la parra o ensarta una mirada en Las Batuecas), nos hablará con su leal afinidad. Esa afinidad, más diría empatía, con la que se expresaban los grandes del cine mudo. Como hacen, semana tras semana, los exterminadores de redes de nuestra liga. Como hicieron, y siguen haciendo en la nostalgia, las canciones de Los Beatles. Algo tienen que ver estos tres elementos, entre sí, para ensamblar la siguiente entrada.

Como soy un tipo al que le gusta clasificar todo, remarcar mis preferencias y piramizar (creo que no existe piramizar pero el sustantivo pirámide debería tener ese verbo) las opiniones pues quería hacer una divertida relación entre tres de las aficiones más comunes y de tan diverso pelaje: fútbol, cine y música. Y digo divertida ya que la idea era confeccionar un once ideal mundial y entroncar a cada jugador con una peli muda y una canción beatleliana. Al final, me ha vencido la pereza y la gripe, así que me he conformado con homenajear a los tres jugadores de nuestra liga que, a día de hoy, alcanzan un nivel de determinación muy superior al resto. Así que, vamos con los tres trípticos.

La máquina del futuro que ingenió Fritz Lang en ´ Metrópolis´ (1927) se llamaba Cristiano Ronaldo. Tenía dos piernas de acero, una recia coraza y un cerebro de fácil retroalimentación. De su engranaje se encargó el científico Mendes. Para perfeccionar la puesta a punto, el robot, necesitaba el elemento mediador –corazón- en aras de la prosperidad de la urbe. Renunció a una dosis de altanería y aprendió a sufrir junto a los mortales proletarios del balón. El corazón vanguardista se llamaba ´Tomorrow never knows´ y conjugaba los dos mundos con efectos especiales en su golpeo, solidaridad con sus hermanos, ruidos atronadores en la celebración y luces lisérgicas sobre el jardín de los acomodados. El atleta del siglo XXI contribuyó a que Metrópolis hiciese frente a la ciudad rival, ´ Senyópolis´.

Estadísticas 2011/12 (* Goles con el Real Madrid)

55 partidos 60 goles 15 asistencias

Estadísticas 2012/13 (*)

13 partidos 15 goles

Un preludio oscuro, sombrío, maquiavélico, envuelto en una atmósfera desasosegante. Un interludio alegre, luminoso, redentor, colmado de ternura. Preludio e interludio preceden al acto final: el gol. Es el proceso natural de Messi con el balón. Antes de su contacto, crea un clima angosto en los rivales y una cortina de ansiedad en aficionados; después, el espectáculo visual derrocha altas gotas de lirismo. Así se suceden las secuencias, como un manantial de claroscuros del ´Amanecer´ (1927) de Murnau. El travelling es el medio en el que se afilan todas las miradas. La caricia de la bota en el cuero ´Something´ flotando sobre el “cebreado” de Abbey Road. Amante o mujer; mujer o amante. Barça o Argentina; Argentina o Barça.

Estadísticas 2011/12 (* Goles con el Barça)

58 partidos 71 goles 22 asistencias

Estadísticas 2012/13 (*)

12 partidos 15 goles 6 asistencias

Radamel Falcao habita en ´ El gabinete del doctor Caligari ´ (1920). En un wienesco y gótico radio viene a desempeñar su influencia. Una influencia que no se resume a las cavidades del área pues extiende sus dominios a media cancha. Todo con constantes giros de tuerca en la toma de decisiones que asfixian a sus marcadores. Su activación con balón desemboca en una atmósfera densa y amenazante: recepciones inclinadas, combinaciones oblicuas y disparos angulosos. Convierte al rival en un tétrico sonambulista, en un despojo disfrazado al son de ´ I am the walrus´ sin saber si es morsa, caracol, tortuga o un tierno corderito. La muerte acecha y el elegido puede ser cualquiera para este expresionista del control y cubista del remate.

Estadísticas 2011/12 (* Goles con el Atlético)

50 partidos 36 goles 5 asistencias

Estadísticas 2012/13 (*)

8 partidos 12 goles 1 asistencia

Del banquillo al camerino: Borussia Dortmund-Real Madrid. Hoy. En un colosal estadio que respira FÚTBOL por todas las vigas y cimientos. Los centros laterales y Lewandowski; la movilidad y verticalidad de Reus. Dos poderosas armas de los alemanes. Sin ´3´ natural, alivia algo que no juegue el polaco Kuba a la hora de crear superioridades por su carril diestro junto a Piszczek. Hay que trabajar mucho sobre la salida de balón de los de Klop.